miércoles, 23 de abril de 2008

BALANCE PSICOESTRUCTURAL


Los ALPHABIOTICOS usamos el término INNERGIA (Energía Interna) para describir el componente más pequeño de la vida en el vasto universo.

Vemos la INNERGIA como una fuerza Espiritual inteligente, y creemos que es el poder que sostiene lo material.


La INNERGIA con respecto a la humanidad, es ese algo que está plenamente presente en una persona que está viviendo un elevado nivel de autorrealización, y disminuida en una persona en la que su conciencia está en deterioro, y casi completamente ausente en la persona que está funcionando en un nivel muy bajo de conciencia.


El usar esta energía interna sabiamente, nos ayuda a aprender y crecer física, mental y espiritualmente. Es el factor más importante para lograr nuestro potencial máximo.


La conservación y la construcción de nuestro suministro personal de energía, nos hace aptos para vivir y funcionar de la manera más efectiva posible. El uso eficiente de esta energía interna, nos ayuda a sobreponernos ante el estrés, acelera nuestro desarrollo y nos hace mejores seres humanos.



Cuando estamos unificados (Balanceados y guiados por nuestro interior), somos más fuertes y vivos en todos los aspectos de nuestra existencia.



Cuando estamos separados (Desbalanceados y manipulados por las cosas exteriores), empujamos hacia afuera esa energía, y nos convertimos en personas débiles, ineficientes y agonizantes.






LOS MUSCULOS

Los músculos constituyen un punto muy importante en la expresión humana. Los músculos débiles y sin respuesta, son un indicador de un poder espiritual minimizado. Una indicación de separación o imbalance.

Cuando una persona es unificada, el tono muscular se armoniza con el espiritu.

Cuando una persona se separa de su espiritu, se refleja en su actividad muscular perdiendo la fuerza, aumenta la tensión, y el flujo de la energía espiritual es disminuida.

La fuerza muscular balanceada es una indicación positiva de un flujo apropiado de energía, y una señal exterior de que podemos crecer, aprender y tener la fuerza necesaria para lograr aumentar nuestro potencial.

La persona que está muscularmente desbalanceada está en guerra consigo misma, en conflicto y confusión con su interior, manifestando en el exterior un aspecto deprimido, agresivo y doloroso.

El imbalance biomecánico es la señal exterior del dominio cerebral derecho o izquierdo.

La mayoría de las personas (por lo menos el 80%) de la población mundial, son dominantes de su hemisferio izquierdo, ocasionado descompensación en el lado derecho de su cuerpo.

Los estudiosos del cerebro humano coinciden que el hemisferio izquierdo es el asiento del comportamiento analítico, matemático, parcial, creativo, con obsesionada tendencia a lo lógico y materialista. Mientras que el hemisferio derecho domina la parte izquierda del cuerpo, pero además es el área del cerebro que representa la vida altruista, el amor por la creación, la espiritualidad y el contacto con su CREADOR – YHWH – DIOS.

Sin embargo, la vida es mucho más bella cuando ambos hemisferios funcionan en balance, en sincronía y armonía.

En este estado de armonía, la inteligencia innata del cuerpo desempeña sus funciones de una manera ordenada. Cuando regresamos al balance, somos como una antena receptora y transmisora que emite y recibe mensajes calibrados del, y hacia el vasto Universo.